MUERTE A LA EDAD DE LA INOCENCIA
Por Supervisora Enfurecida
22 de enero de 2017
Matalascabrillasdelmonte (Churriana De Abajo)
El día 16 de enero de 2017 os propuse contestar una encuesta a través de mi cuenta, @SupervisoraEnfu, al respecto del asunto #VergüenzaSATSE (pasaos por ese hashtag si no sabéis de lo que estoy hablando). Aquí la podéis ver con sus resultados. Os tengo que decir que ha sido la encuesta tuitera con mayor número de respuestas de todas las que os he planteado ¡Bravo!
Al cerrarla el 17 de enero os prometí un “análisis elegante”… en fin, lo que en realidad me ha salido es un análisis puede que no muy elegante, pero con ganas de que lo reflexionéis y lo discutamos. Y antes de meterme en materia, le quiero dar las gracias al gran @duemileurista por prestarme un espacio en su blog. Vamos allá.
Muchos de vosotros, conforme respondíais, protestabais gruñendo que ”todas eran ciertas”, que eran “causa-efecto” o que se necesitaba una “respuesta múltiple”. Y @juherya, con mucha razón, se decantaba claramente por “impunidad”. Muy acertados todos. Bien pensado, chicos listos. Y esas reflexiones tan certeras indican que la enfermería va caminando hacia el pensamiento crítico y se va alejando de una forma de pensar ingenua. Por eso creo que estamos en el comienzo de la muerte de nuestra edad de la inocencia. La otra cara de la moneda es que aún nos queda mucha tela que cortar.
Fijaos, habéis seleccionado como respuesta mayoritaria que todo este asunto ha ocurrido porque hay “mucha mafia junta”. Os confieso que me ha sorprendido y quiero dejar claro (y no estoy bromeando) que considero que el SATSE como organización no merece ese apelativo. Es una organización con muchísimos delegados de a pie que trabajan duro y para esa masa de gente honrada va mi reconocimiento.
Sin embargo, en todas las organizaciones (no se salva ninguna, que yo sepa) hay grupos o personas individuales que no hacen justicia a sus instituciones: son lo que podríamos llamar “Equipos Con Intereses Propios” o ECIP (ojo que acabo de inventarme esa abreviatura). Y que éstos existan, desde mi punto de vista, es síntoma de una cadena de despropósitos. Yo me pregunto, ¿por qué un ECIP aparece en un entorno determinado? Respuesta: porque se dan las condiciones para poder hacer de listillos con pocos problemas. ¿Conocéis algún listillo que permanezca en un lugar donde conseguir sus objetivos sea problemático? ¿A que no? Pues eso.
Y, venga, ¿cuál o cuáles son esas condiciones? Yo lo tengo claro, como apuntaba @juherya: la impunidad. Si un colegio profesional puede no convocar elecciones y no pasa nada; si un consejo general puede tener un presidente que no puede serlo según diferentes sentencias judiciales y no pasa nada; si otro colegio puede presentar unas cuentas tan genéricas que justifiquen cualquier gasto y no pasa nada; si uno se puede colegiar y descolegiar con fines instrumentales y no pasa nada… Houston… tenemos lo que tenemos.
Y más madera, la impunidad, o sea, hacer lo que te da la gana sin que se te despeine la peluca, tiene dos grandes factores: 1) leyes insuficientes con una justicia lenta y 2) unas enfermeras poco vinculadas a sus organizaciones colegiales.
Porque sí, tenemos leyes insuficientes. Leyes por las que los ECIP no son en absoluto delincuentes ¿Conoces la Ley de Transparencia y Buen Gobierno? ¿sabes cuál es su alcance? ¿y sus objetivos? ¿sabes que el Consejo de Transparencia y Buen Gobierno no tiene poder sancionador? ¿o que la Ley es limitada a la hora de conseguir que los colegios profesionales rindan cuentas de forma exhaustiva? ¿conoces la Ley de Colegios Profesionales? ¿sabes a qué obliga y qué campos deja en la imprecisión? ¿sabes lo que implica batirse el cobre a base de demandas con la organización colegial o los sindicatos? ¿sabes que la justicia es TAN lenta que para cuando entra al trapo ya estamos calvos?
Y sí, tenemos unas enfermeras que no acuden a las asambleas de sus colegios, que pagan religiosamente y no preguntan en qué se usa su dinero, o que se encogen de hombros cuando les dices que les hurtan la democracia en sus colegios. También tenemos enfermeras que se colegian en provincias diferentes a la suya (y no están colegiadas en la suya propia). Y yo pienso ¿a santo de qué te vas a pagar una cuota colegial fuera de tu provincia, si donde tienes que votar e implicarte es en el colegio del lugar en el que ejerces? Esto último es altamente recomendable, ya que las autoridades de la provincia en la que ejerces van a negociar temas que te interesan con el colegio de esa provincia. Y si no estás colegiado ahí pierdes la voz y el voto. A no ser que te interese más que te den entradas de circo gratis u otras “ventajas” de chicha y nabo, en vez de pelear en tu provincia por tu profesión. Eso por no hablar de la ética y la estética y ya tal…
Pues eso, la próxima vez que alguien te explique que en tu colegio profesional pasan cosas raras, la próxima vez que alguien te sacuda y te pida que salgas de tu zona de confort, pregúntate en qué punto de la muerte de la inocencia estás y si puedes o debes hacer algo más para acabar con ella del todo.